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¿Cómo saber si necesito otra graduación en mis lentes? Estas son las señales de alerta

La salud visual es fundamental para tu día a día, pero muchos olvidan que la graduación de lentes no es estática; de hecho, puede variar con el tiempo. Ante este cambio constante, es necesario saber cuándo debes renovar la graduación de tus lentes para asegurar que tu visión sea perfecta.

La visión borrosa y otros defectos refractivos son los principales motores de cambio para la graduación de tus lentes. Además, la miopía, que los objetos lejanos se vean borrosos, puede aumentar si no se trata de forma adecuada.

Para evitar complicaciones, es necesario conocer las señales que indican que tu visión ha cambiado y cómo protegerte de las consecuencias de usar una graduación incorrecta.
La graduación en los lentes debe modificarse según la forma en que funcionen, aunque no es estática. Canva.

¿Cómo saber si necesito otra graduación en mis lentes?
La prioridad de tus lentes es compensar a la perfección cualquier defecto, como miopía, hipermetropía, astigmatismo o presbicia, y mejorar tu calidad visual.

Si notas que ya no cumplen su función, es señal de que necesitas una evaluación profesional.

Te dejamos las señales de que es momento de visitar a un especialista, según la Academia Americana de Oftalmología en EU (AAO) y el Colegio Nacional de Optometristas de España.

Visión borrosa: Percibir que la nitidez que antes tenías ha disminuido, especialmente al mirar a lo lejos.
Dolor de cabeza: Una señal común de que tus ojos están haciendo un esfuerzo excesivo para enfocar.
Molestias oculares: Sentir incomodidad o irritación directamente en los ojos al finalizar el día.
Parpadeo constante: Un intento involuntario de tu ojo por aclarar la imagen y mejorar el enfoque.
Cansancio visual: La sensación de fatiga después de realizar tareas visuales prolongadas.
Dificultad para enfocar de cerca: Un cambio normal que ocurre a medida que envejeces, especialmente después de los 40 años (presbicia).
Si tu visión es borrosa o te duele la cabeza, es momento de cambiar de lentes. Canva.

¿Qué pasa si usas lentes con graduación incorrecta en los lentes?
Usar una graduación que no es la correcta, especialmente si te dan una graduación menor a la necesaria (infradotación), trae consecuencias que van más allá de una simple incomodidad.

Estas son las posibles consecuencias del uso de lentes desactualizados, según los Institutos Nacionales de Salud en EU (NIH) y un estudio publicado en Journal of Clinical Medicine:

La visión deficiente puede afectar tu capacidad para realizar actividades diarias o tu seguridad al conducir.
Riesgo de empeorar la miopía en niños: Usar una graduación menor a la necesaria podría exacerbar la miopía en menores.
Afectación del rendimiento escolar: En niños y adolescentes, la visión deficiente puede limitar o incapacitar su desempeño educativo.
Problemas sociales en la infancia: Los niños no corregidos completamente podrían enfrentar el riesgo de acoso o exclusión social.
Exigencia innecesaria al sistema visual: El ojo y el cerebro deben esforzarse continuamente para compensar el error, causando los síntomas de fatiga.

¿Qué hacer si necesito otra graduación en mis lentes?
Si has notado alguno de los síntomas anteriores o simplemente ha pasado mucho tiempo desde tu última revisión, la clave es la acción preventiva. No esperes a notar una pérdida evidente en la calidad de tu visión; anticípate.

Te dejamos pasos a seguir si notas que necesitas otros lentes, de acuerdo con la AAO:

Realiza un examen integral: Los adultos sin signos de riesgo deben hacerse una evaluación ocular integral de referencia a los 40 años.
Sigue el calendario de revisión: Se recomienda al menos una revisión visual una vez al año. En niños o personas con defectos visuales, la recomendación puede ser cada seis meses.
No uses lentes de farmacia, ya que no están diseñados para la graduación específica de tus ojos.
Es normal que tu cerebro necesite unos días o hasta un par de semanas para adaptarse a la nueva graduación. Si la adaptación no se produce, vuelve a consultar.
Usa la corrección adecuada: Tu nueva graduación se puede corregir usando anteojos o lentes de contacto, según tu preferencia y el consejo del especialista.
La frecuencia de tus revisiones oculares y el consecuente cambio de graduación dependen de tu edad y tu historial. Dejar pasar el tiempo sin una corrección adecuada no solo es incómodo, sino que puede comprometer seriamente tu desarrollo y calidad de vida.