Estafas inmobiliarias: ¿cómo evitar ser víctima de engaño al comprar una vivienda?
Las denuncias de estafas inmobiliarias siempre generan mucho ruido, aunque no son tan frecuentes como se pudiera pensar, pues se trata de casos aislados en medio de miles de transacciones de compra y venta de viviendas y terrenos que se realizan cada año en República Dominicana.
Sin embargo, para quienes han sido víctimas de estos engaños, la situación no se ve como una simple estadística, sino como un hecho que pudo acabar con los ahorros de toda una vida de individuos y familias. Esto así, porque la compra de una vivienda no es algo que se hace con frecuencia. De hecho, en promedio, una persona puede que adquiera una vivienda una sola vez en su vida.
Pero existen diversas formas de evitar las estafas inmobiliarias y para ello la información abunda. Lo que ocurre es que muchas personas no se informan previo a la realización de una compra tan delicada y costosa como la de una vivienda.
Lo primero se relaciona con la empresa constructora. Es posible que le ofrezcan la venta en plano o ya con la edificación avanzada en su construcción. Si usted recibe una oferta, no la tome de redes sociales ni de anuncios virtuales. Vaya directamente a la sede o local principal de la empresa constructora para procurar la información requerida.
En torno a la información a procurar, lo primero es tomar en cuenta que ninguna empresa constructora reconocida realiza un proyecto de viviendas sin un financiamiento bancario. Por eso, es oportuno preguntar, sin timidez, cuál es la entidad bancaria que financia el proyecto. Con esa información, ya usted tiene la oportunidad de hacer depuraciones de seguridad.
Usted puede ir o llamar al banco que financia el proyecto y preguntar si es así, lo cual será confirmado de inmediato por la entidad bancaria. Incluso, es posible que ahí mismo le ofrezcan tramitarle el financiamiento para la compra del inmueble. Si lo hace por esa vía, la depuración de la empresa, título de propiedad y otros trámites de seguridad los hará directamente el banco en cuestión, con lo que se libera de cualquier riesgo de estafa.
En caso de que no vaya a financiar la compra de la vivienda, lo cual no es recomendable, pues lo ideal es que pague una parte de inicial y que el resto lo haga por medio de un préstamo hipotecario, de todas formas debe hacer la depuración correspondiente con el banco que financia el proyecto.
Si la empresa constructora le dice que está desarrollando el proyecto con recursos propios, no es confiable. Es muy difícil, casi imposible, que una constructora reconocida desarrolle un proyecto de vivienda sin un financiamiento bancario.
Otra forma de verificación efectiva es la consulta al gremio que agrupa a los constructores, es decir, la Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas (Acoprovi), que aparece en redes sociales, en internet y por cualquier otra vía. Usted llama a esa organización y pregunta si tal o cual empresa constructora forma parte de su membresía. Si no lo está, entonces también debe desconfiar.
Otra forma de depuración, más para viviendas terminadas y de medio uso, es acudir a la Dirección de Registro de Títulos, de la Jurisdicción Inmobiliaria, donde gratuitamente, usted puede verificar su el título de propiedad está a nombre de la persona que le está vendiendo y si no tiene hipoteca.
Residentes en el exterior
Muchas víctimas de estafas inmobiliarias son dominicanos residentes en el exterior o personas que están en la informalidad y no se relacionan con el sector financiero formal.
Los dominicanos en el exterior tienden a llevarse de las promociones en redes y a empoderar a algún amigo o familiar en el país para que se encargue de los trámites. Hay ocasiones en que el fraude no proviene de la empresa constructora, sino del apoderado en cuestión.
En cuanto a los trabajadores informales, muchas veces desean hacer la compra con pagos de dinero en efectivo y sin financiamiento, lo cual tiene limitaciones legales, pero también le pone en el riesgo de hacer negocios con supuestos promotores de viviendas que muchas veces no lo son.
En todo caso, lo ideal es ir siempre directamente a la empresa constructora de manera personal y asegurarse de que el proyecto tenga financiamiento de la banca formal o de algún fideicomiso, como se están desarrollado muchos proyectos en la actualidad.
Tome en cuenta que, cuando es una compra con crédito bancario, el banco no desembolsa el préstamo a favor del constructor hasta tener la verificación de que ya está disponible el título de propiedad de la vivienda a financiar y que ya haya sido entregada al adquiriente.
Por eso, si alguien le dice a usted que el banco hizo el desembolso del préstamo que usted tomó a favor del constructor, no le crea, pues eso se hace solo cuando la el inmueble ha sido terminado y entregado al comprador.
Algunas recomendaciones
- Verificación. Verifique en Acoprovi o en el banco, que la constructora es reconocida.
- Préstamo. Financie una parte del valor del inmueble, aunque usted tenga el dinero completo.
- Titulación. Si es un inmueble terminado, vaya a Registro de Título y verifique que esté depurado.
- Confianza. Cuidado con la persona (familiar o amigo) a quien apodera para tramitarle la compra.
- Pregunte. Como cliente, usted tiene derecho a preguntar y verificar todo sobre la propiedad.
- Legalidad. No transfiera pagos sin antes tener las comprobaciones y garantías requeridas.