Por qué cambió el tono de mi voz: 2 enfermedades crónicas que podrías padecer

La voz cambia a medida que envejecemos, se vuelve más grave con el paso de los años, pero no nos damos cuenta porque nos acostumbramos a ella. Sin embargo, cuando el cambio es notorio ahí sí hay que prestarle más atención porque a menos que tengas ronquera o infección de garganta, existen 2 enfermedades crónicas que podrías padecer. Sigue leyendo y descubre por qué cambió el tono de tu voz.

Dulce, ronquita, delgada, grave o aguda… existen muchos tipos de voz, es parte de nuestra personalidad, revela nuestras emociones; suele ser más baja en una situación triste o melancólica y más enérgica cuando estamos felices, pero también puede ocultar afecciones que causan disfonía, por ejemplo, cuando se vuelve más aguda o "chillona".

¿Qué es la disfonía?
Se trata de una alteración en el tono de voz, la mayoría de las veces se debe a un esfuerzo constante, debido a trastornos que afectan tanto a la laringe como a las cuerdas vocales, por lo regular, la disfonía aguda desaparece en un par de días si es por infección o virus, pero cuando es disfonía crónica la situación es completa, describen especialistas del instituto médico Mayo Clinic.

Nuestra laringe está compuesta por cartílagos, músculos y membranas mucosas que se ubican en la parte superior de la tráquea y en la base de la lengua, por otra parte, las cuerdas vocales son dos bandas flexibles de tejido muscular que se ubican justo en la entrada de la tráquea, por ello, el sonido de la voz se produce con la vibración de las cuerdas.

Si existe una afectación en laringe o las cuerdas vocales se inflaman, hay tumores o se paralizan, entonces presentaremos cambios muy marcados en la voz, por ejemplo, un tono más ronco o agudo, la garganta se siente irritada, dolorida o cansada, debes esforzarte para hablar, la voz se escucha temblorosa.

¿Qué enfermedades cambian la voz?
La calidad de la voz se puede ver afectada por enfermedades de la tiroides, como hipertiropidismo e hipotiroidismo, debido a que la tiroides es una de las glándulas de secreción hormonal que influyen en el tono de la voz.

Cuando hay un problema es por hipotiroidismo, se produce un nódulo que retiene líquido en las cuerdas vocales, por ello, suele ser más áspera, opaca, aguda o sin energía, describe un artículo publicado en The Eurasian Journal of Medicine.

El cáncer de garganta es otra de las razones por las que puede cambiar nuestro tono de voz, aunque los síntomas de alerta pueden presentarse según la ubicación del tumor, por ejemplo, en la laringe, la glotis, supraglotis y subglotis, lo cierto es que cuando se encuentra en la glotis, afecta las cuerdas vocales causando una disfonía, tos persistente, ronquera, dolor de garganta o dificultad para comer.

Aunque la siguiente no se trata de una enfermedad, los nódulos en las cuerdas vocales también podrían ser una causa que afecte el tono de tu voz, un tipo de tejido calloso que puede presentarse por un mal uso de la voz, como en el caso de “El Príncipe de la Canción”, que perdió su capacidad para cantar.

¿Cómo se tratan los trastornos de la voz?
El tratamiento para los trastonos que afectan la voz dependerá del diagnóstico que te brinde tu médico, pero podría recomendarte algunas de las siguientes opciones:

Medicamentos: existen muchos medicamentos que pueden tratar los trastornos de la voz, según sea su causa, los cuales están destinados para reducir la inflamación o evitar que los vasos sanguíneos vuelvan a crecer. Este tipo de medicamentos se administran por vía oral, se inyectan directamente en las cuerdas vocales o aplicarse en la superficie de las cuerdas durate la cirugía.

Descanso, terapia de la voz: al igual que el resto del cuerpo, las cuerdas voales necesitan descanso regular y muchos líquidos para recuperarse.

Extirpación de tumores: aunque los tumores que se presenten en las cuerdas vocales no sean cancerígenos, es posible que deban extirparse a través de una cirugía para evitar futuras complicaciones.

Inyecciones: las inyecciones de toxina butolínica, pueden ayudar a detener los espasmos musculares de la garganta.

Ahora que ya sabes qué enfermedades pueden cambiar el tono de tu voz, no lo tomes la ligera. Acude con tu médico a tiempo porque la voz es nuestro instrumento, es parte de nuestra personalidad, cuídala mucho y atiende a tiempo estos padecimientos que la podrían afectar.