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Acusan a Puff Daddy de practicar oscuro ritual con animales

Las controvertidas historias alrededor de Sean "Diddy" Combs, también conocido como Puff Daddy, se fueron acumulando las últimas semanas, tras la detención del rapero acusado de cometer abusos reiterados en las fiestas salvajes que organizaba. Ahora trascendió una nueva acusación que lanzó uno de sus exguardaespaldas en un documental.

De acuerdo a lo que contó Gene Deal, el productor musical practicó un oscuro ritual en medio de la calle que incluyó sacrificios de animales en marzo de 2001, horas antes de haber evitado ir a la cárcel por un tiroteo en el que había quedado involucrado junto a Jennifer Lopez.

Cómo fue el ritual con animales que hizo Puff Daddy

La situación se dio en la previa a que Diddy recibiera el veredicto en el juicio por el que uno de sus protegidos en esa época, Shyne Barrow, fue condenado. El músico frenó en un lugar del Central Park y practicó el particular rito.

Puff Daddy y Shyne Barrow a fines de los 90

Según lo que dijo Deal en el documental Barrow, The Honorable Shyne, Combs se encontró con un hombre que lo esperaba en esa zona de Nueva York. “Cuando Puff se acercó, el tipo se arrodilló. Lo siguiente que vi fue humo que iba y venía alrededor de Puff. Supongo que era salvia o algo así”, comentó.

Con una biblia en sus manos, el hombre empezó a rezar y, de acuerdo al testimonio de Deal, le dijo a Diddy que abriera una jaula en la que había un ave, presuntamente una paloma. “Puff tomó el pájaro blanco, lo lanzó al aire y simplemente cayó al suelo como si fuera un ladrillo. Yo estaba como, ‘¡oh, m…!’. El pájaro murió, ni siquiera se movió. Él (por Combs) simplemente se fue muy rápido de allí“, repasó el exguardaespaldas.

Tras aquel ritual oscurísimo que hizo Diddy, el rapero fue absuelto de los cargos que se le imputaban. Mientras se leía el veredicto en voz alta, Combs tomaba con fuerza aquella biblia: al salir del juzgado con su madre Janice a su lado, el músico expresó que se sentía “agradecido” y “bendecido” por haber limpiado su nombre.

Mientras tanto, Barrow fue declarado culpable de agresión, imprudencia temeraria y posesión ilegal de armas. Fue sentenciado a 10 años de prisión y tras su liberación en 2009, fue deportado a Belice. Allí, su vida dio un giro por completo al transformarse en una de las figuras más importantes de la política.